A través de un artículo del New York Times, “Can't find a parking spot? Check smartphone“, llego a Streetline, una compañía dedicada al desarrollo de soluciones para la gestión de infraestructuras en las ciudades, que ha creado un sistema para optimizar el aparcamiento en San Francisco: una serie de sensores inalámbricos en cada plaza de aparcamiento controlado (en la primera fase, seis mil plazas sobre un total de veinticuatro mil) conectados entre sí en una red mesh que transmitirá la información sobre disponibilidad a un registro central, que la situará en una página web accesible desde smartphones y otros dispositivos.
Los sensores tienen un coste muy bajo, son muy resistentes, y tienen una batería interna que dura entre cinco y diez años (más información en la página de la compañía). Además, en la red mesh se integran otras infraestructuras, como medidores de calidad del aire, sensores de ruido capaces de alertar de circunstancias como un disparo o una colisión, indicadores de tiempo para los parquímetros que permitan a los clientes recargarlos sin acudir al lugar donde se encuentra el coche, etc.
Toda una forma interesante de plantearse la gestión urbana asociada a esa “Internet de las cosas” de la que tanto se comenta…
(Enlace a la entrada original - Licencia)
0 comentarios:
Publicar un comentario
ATENCIÓN: Google ha metido en Blogger un sistema antispam automático que clasifica como spam casi lo que le da la gana y que no se puede desactivar.
Si después de hacer tu comentario este no aparece, no se trata del espíritu de Dans que anda censurando también aquí, es que se ha quedado en la cola de aceptación. Sacaré tu mensaje de ahí tan pronto como pueda, si bien el supersistema este tampoco me avisa de estas cosas, por lo que tengo que estar entrando cada cierto tiempo a ver si hay alguno esperando. Un inventazo, vaya.