Ahora que en España las multas de tráfico se han convertido en un patético impuesto indirecto con mero afán recaudatorio que cada vez tiene menos que ver con el fomento de una conducción segura, reconforta ver que en California, un tribunal de apelación ha anulado una multa impuesta a Shaun Malone, un joven que fue fotografiado por un policía circulando supuestamente a 62 millas por hora en una zona limitada a 45. La razón para la anulación de la multa se basa en que el automovilista, de dieciocho años, llevaba instalado en su coche un dispositivo que permitía a sus padres monitorizar su comportamiento al volante: el aparato, fabricado por Rocky Mountain Tracking, enviaba una medición de la velocidad a la que circula el automóvil cada treinta segundos, un mensaje de correo electrónico cada vez que superaba las 70 mph., y tomó una lectura que mostraba que Shaun circulaba exactamente a 45 mph. en el exacto momento en que el policía midió 62. En la apelación, un perito experto en tecnología GPS que había manifestado dudas en el primer juicio acerca de la precisión del aparato instalado en el coche de Shaun, afirmó haber comprobado las lecturas del mismo y haberlas encontrado adecuadas, hasta un límite de dos metros en la localización y una milla por hora en la velocidad. El juez de apelación procedió a la anulación de la denuncia, de $190, pero que puede acabar teniendo una trascendencia mucho mayor dado el precedente de admitir una medición privada confrontada a la oficial efectuada por la policía.
Hace pocas semanas, recibí una multa por exceso de velocidad en un tramo en el que yo circulaba con el limitador de velocidad de mi coche activado, y fijado en el límite legal del tramo. Si unimos a ello la evidencia de que las mediciones mostradas por el velocímetro del coche suelen estar sistemáticamente entre diez y quince kilómetros por hora por debajo de la velocidad real de circulación mostrada en un dispositivo GPS cuando se circula a 120 Km/h, la evidencia de un error por parte del aparato de radar de la policía aumenta. ¿Llegaremos a un punto en el que la disponibilidad de tecnologías en manos del público, convertidas en auténticas “cajas negras”, nos permitan confrontar nuestras mediciones a las de los aparatos de la Guardia Civil de Tráfico? ¿O, siguiendo el razonamiento inverso, a que directamente nuestro automóvil registre nuestras violaciones de las normas de circulación y nos las notifique a modo de “radar incorporado”?
(Enlace a la entrada original - Licencia)
El EDans este me ha vuelto a censurar un comentario en su blog, así que comento aquí. A partir de ahora cada vez que intente comentar algo en su blog lo copiaré aquí antes de que lo borre porque ya no me acuerdo de lo que escribí.
ResponderEliminarEso sí, me refería a que el discurso este de "qué malos son los guardiaciviles, que solo nos multan por motivos recaudatorios" solo lo tienen los que van por ahí a 160 con sus megacoches 2.0 poniendo en riesgo la vida de los demás. No puedo dejar de imaginarme a Dans con su Volvo, Audi o lo que sea a 180 por las carreteras haciendo slalom: "Quítate, so mamón, que pareces de las SGAE!!". Terroristas. Lamentable.
palcraft, en mi opinón EDans es un tío peligroso porque a su vasta incultura informática en cuanto le sacas de los cacharritos se une la importancia que le están dando los que saben todavía menos que él, que babean con sus palabras, y que tienen poder. No me gusta tener en mi país a un tio tan tonto con cierta influencia. Al menos que la gente tenga otro punto de vista sobre las tonterías que dice. Internet es libre.
ResponderEliminarAh, y lo de enrollaete y guay... con esta personalidad solo escribo en el blog de EDans y ahora en este. No pretendo parecer nada en ningún sitio. Y no tengo ni blog, ni página personal ni nada que se le parezca. Me limito a opinar.
ResponderEliminarPues ya ves, por muy raro que te suene he leido tu comentario, lo he tenido en cuenta, he pensado sobre él y he contestado honestamente, y me da igual quien seas, porque no he hecho clic en tu nombre. De hecho raramente lo hago, salvo que el propio comentarista diga algo que me lleve a ello.
ResponderEliminarPor lo demás, la confianza que yo inspire creo que es problema exclusivamente mío. Como comprenderás me meteré en muchos menos problemas poniendo en solfa a Enrique desde el anonimato que dando nombre y apellidos. Sí, cobardía, dilo, no me importa. Pero qué quieres que te diga, no creo que haya nada implícitamente malo en la cobardía. Para mí lo de "ten cojones" y esas cosas me suena a rancio y poco práctico.
Ah, y por cierto, todo el sistema de copia del blog de EDans es automático, el único tiempo que "pierdo" es cuando opino.