14 septiembre 2011

La tecnología y los dos lados de la valla

Una interesante entrada en el blog de David E. Harrington, profesor de Economía, titulada (Moral) Hazards of Scanning for Plagiarists: Evidence from Shoplifting, trae a debate un tema que refleja la dualidad de uso que en muchas ocasiones presenta la tecnología y la conveniencia de su uso en determinados contextos.

Turnitin es una herramienta muy popular en ciertos entornos académicos. En IE Business School, por ejemplo, es una de las herramientas que todos los profesores tenemos disponibles en el menú de opciones del campus online desde hace ya bastantes años: permite, con total facilidad, contrastar cualquier trabajo remitido por un alumno o grupo de alumnos contra una la base de datos de Turnitin, que devuelve una serie de alarmas y puntuaciones con el porcentaje de contenido de dicho texto que proviene directamente de algún otro documento. El planteamiento es, por así decirlo, el de una especie de “policía electrónico” que expone al profesor casos de copia de contenidos, y le permite tomar acción si lo estima oportuno (en IE Business School, como en muchos otros entornos académicos, el plagio es una falta grave que puede conllevar la expulsión de un alumno). En mi caso, es una herramienta que utilizo en muy raras ocasiones, casi siempre para exponer o fundamentar una sospecha que ya de por sí era patente, en el marco de una metodología, la de mis cursos, en el que la copia de contenidos no tiene demasiado sentido. Resulta mucho más habitual para mí introducir una frase en Google en caso de sospecha que pasar por Turnitin, aunque es indudable que el hecho de que los alumnos sepan simplemente que la herramienta está ahí puede actuar como un desincentivo para ellos.

Comparto con el artículo muchas de las salvedades del uso de Turnitin: puestos a plantear una protección real al plagio, la base de datos de Turnitin, que afirma orgullosamente un inventario de catorce mil millones de páginas, no es gran cosa cuando la comparamos con las más de un billón de páginas que existen en la red, además de que en la base de datos no se incluyan populares páginas de acceso mediante pago o contraseña como las del New York Times, Wall Street Journal u otras. Por otro lado, el uso de Turnitin crea en el caso del profesor una cierta sensación de “ya está todo controlado” que puede llevar a una falsa sensación de certeza, cuando en realidad solo el sentido común es adecuado a la hora de decidir qué supone un uso éticamente aceptable y qué no. En mi caso, por ejemplo, la incidencia de la copia de contenidos disminuye notablemente a medida que muchos de mis alumnos empiezan a manejar con soltura su blog personal: copiar vinculando a la fuente original no es considerado lógicamente una copia al poseer atribución directa a la parte citada, y bien manejado, puede suponer una herramienta mejor que el simple copiar y pegar.

Pero el caso se torna todavía más interesante cuando vemos que Turnitin comercializa otra herramienta, llamada Writecheck, con el planteamiento de ofrecer servicios precisamente “al otro lado de la valla”: si Turnitin ayuda a los profesores a localizar y reconocer caso de plagio de contenidos, Writecheck se plantea como una herramienta para que los alumnos pasen sus ejercicios y obtengan la prueba de que los mismos no van a ser detectados por Turnitin. Dado que Writecheck puede ser utilizada de manera iterativa, nada impide a un estudiante, hipotéticamente, “fusilar” completamente un ejercicio que se encuentra por la red, y dedicarse a cambiar su redacción mediante sinónimos y giros lingüísticos hasta conseguir que Turnitin no lo detecte, lo que añadiría al plagio una cantidad importante de estupidez (pero podría supuestamente pasar sin ser detectado).

Para Turnitin, el argumento parece lógico: construyo una base de datos, y le doy todo el uso que pueda en forma de productos que pongo en el mercado. La tecnología es neutral, sirve para cosas buenas o malas según cómo la utilices. Supuestamente, Writecheck puede servir para mejorar la redacción, para escribir ensayos estilísticamente mejores, etc., pero a nadie escapa que el uso más habitual es ni más ni menos que el de escapar al control de Turnitin, la herramienta que la empresa vende a los profesores.

¿Invalida o reduce la existencia de Writecheck la propuesta de valor de Turnitin? No, simplemente plantea lo que suele llamarse “tecnologías de doble uso“. Seguramente, como plantea Harrington, debería llevarnos más a analizar si realmente necesitamos esa tecnología o, más bien, replantear nuestras metodologías académicas para que determinados comportamientos empiecen a tener menos sentido. O, como mínimo, que no deberíamos fiarnos tanto de según qué policías…

(Enlace a la entrada original - Licencia)

3 comentarios:

  1. Bueno , yo estoy buscando información sobre Tuninitin para hacer un trabajo de inglés, jejeje y me pongo a mirarlo en Español, total de esta manera m he enterado del famoso programa que no había escuchado nunca. He buscado información en Google así como "La Verdad de Tunitin” “Censura Tunitin” y así es como di con tu página, antes de esto encontré varios Blog que los elaboradores de estos decían que se le habían introducido el tunitin y daba como plagio fotos que eran autorizadas por otros. En fin, yo creo que es un nuevo sistema de “Censura” lanzándose con la excusa de que los profesores controlen el plagio, por eso aunque tu página no estaba marcada como segura para ser abierta yo me arriesgué a abrirla.
    Así como tu dices esto :
    “que afirma orgullosamente un inventario de catorce mil millones de páginas, no es gran cosa cuando la comparamos con las más de un billón de páginas que existen en la red”
    Quizás la gente normalmente se moleste a mirar las dos o tres como max. primeras entradas que Google da en la búsqueda, normalmente la gente no mira mas.
    En cuanto a este otro comentario:
    “…además de que en la base de datos no se incluyan populares páginas de acceso mediante pago o contraseña como las del New York Times, Wall Street Journal u otras”
    Así como “tuniti a mí me parece más un bloqueo de libertad de expresión y de difundir información de ideas propias y no gubernamentales o de lavado de cerebro, (quiero decir) No será que igual no se considere plagio las páginas con información que interese que sea difundida y reconocida mundialmente, como un ejemplo así como: Si ha Madonna le ha salido una espinilla o se hace vieja, o si los Americanos en una afán de reconocimiento mundial por sus héroes y victimismo sobre su país montar un atentado y tunito conceder como legal y justa la información y no como plagio?
    En fin, esta es mi humildad opinión y siempre veo cinco pies al gato en vez de cuatro, mis pensamientos son un poco diferentes a la mayoría, y eso no me enorgullece como a los tontos me frustra, pero eso me hizo abrir tu enlace.
    En fin ahora a ver si lo puedo enviar por que a veces no se permiten los comentarios tampoco.
    Un saludo y gracias por darme la oportunidad de comentar.
    Suerte

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  2. Espero que se entienda algo no se que escribo mejor ingles o Espanyol, tenia que haberlo corregido un poco.
    Saludos

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  3. corrigiendo un poco tarde, yo no queria llamarme tonta queria decir: ...y eso no me enorgullece como a los tontos, me frustra, pero eso me hizo abrir tu enlace.

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Si después de hacer tu comentario este no aparece, no se trata del espíritu de Dans que anda censurando también aquí, es que se ha quedado en la cola de aceptación. Sacaré tu mensaje de ahí tan pronto como pueda, si bien el supersistema este tampoco me avisa de estas cosas, por lo que tengo que estar entrando cada cierto tiempo a ver si hay alguno esperando. Un inventazo, vaya.