16 noviembre 2012

Compañías jurásicas, mi columna en Expansión

Mi columna en Expansión de esta semana se titula “Compañías jurásicas” (pdf), y habla del auténtico parque jurásico tecnológico en el que se están convirtiendo algunas empresas al incidir el prácticas completamente desfasadas de gestión de sus sistemas de información. No, la empresa no es un sitio para “estar a la moda” tecnológicamente hablando, las inversiones hay que plantearlas con la adecuada racionalidad, pero tampoco debe convertirse en un reducto que haga sentir a sus usuarios que descienden a las catacumbas del pasado cuando la comparan con la tecnología que utilizan en su día a día, con la que tienen en su casa o con la que llevan en sus bolsillos.

Generaciones de directivos de tecnología juzgados únicamente en función de la estabilidad y seguridad de los sistemas y con escasa querencia a la innovación o al cambio están llevando a que muchas de las tecnologías que podrían aportar ventajas de flexibilidad, usabilidad o interacción queden enterradas bajo capas de procedimientos ultraconservadores y rigideces de todo tipo, mientras otras empresas van optando por políticas de BYOD o COPE, por gestionar sus recursos en la nube, por trabajar con documentos compartidos o por abandonar actitudes paternalistas con sus empleados. La tecnología es perfectamente capaz de aportar ventajas competitivas. Pero para eso, hay que mantenerse al día, y no seguir haciendo las cosas como hace veinte años. ¿Trabajas en una empresa jurásica?

A continuación, el texto completo del artículo:

 

Compañías jurásicas

Cada día más, la tecnología define a las compañías. ¿En qué tipo de empresa trabaja? Hay empresas jurásicas: tecnología monolítica, opciones, nulas, hardware y software  como decisiones centralizadas a la que hay que ajustarse obligatoriamente… la diversidad es una amenaza, un problema. “Los de tecnología” privilegian la estabilidad, odian la innovación, dificultan las cosas, ponen peros.

En empresas modernas, la actitud es diferente. El BYOD (“Bring Your Own Device”, o “trae tu propio dispositivo”) está soportado, tolerado o planificado en el 71% de las empresas norteamericanas, y algunas incluso adoptan COPE, “Corporate Owned, Personally Enabled”: la organización compra y posee el dispositivo que su empleado escoge, pero éste es libre para instalar en él lo que quiera. Si su director de tecnología palidece al escuchar estas tendencias, ya lo sabe: tiene ante sí a un profesional desfasado.

¿Dónde están sus servidores? ¿Sigue pagando muchísimo por poseer máquinas que podría alquilar a especialistas con un coste muy inferior y disponibilidad y prestaciones más elevadas? ¿Y su ofimática? ¿Tiene a sus empleados mandándose ficheros adjuntos como posesos, o ya trabajan y colaboran directamente en documentos compartidos en la red? ¿Trata todavía a sus empleados como a niños pequeños, y se dedica a decirles en qué páginas pueden entrar y en cuáles no?

Hace años, la empresa era el sitio donde una persona veía tecnología “avanzada”. Hoy, muchas empresas son auténticos “parques jurásicos”, y sus empleados manejan tecnologías más avanzadas en su vida personal. Si su empresa es jurásica, está perdiendo imagen, rendimiento y potencial de innovación.

La tecnología ha evolucionado muchísimo en los últimos años: las empresas ya no pueden ser reductos ultraconservadores y paternalistas en los que se perpetúan modos de trabajo antiguos bajo un feroz inmovilismo. Si la tecnología en su empresa va muy por detrás de la que se usa fuera de ella o de la que usan sus hijos, ya sabe: es momento de cambiar.



(Enlace a la entrada original - Licencia)

0 comentarios:

Publicar un comentario

ATENCIÓN: Google ha metido en Blogger un sistema antispam automático que clasifica como spam casi lo que le da la gana y que no se puede desactivar.

Si después de hacer tu comentario este no aparece, no se trata del espíritu de Dans que anda censurando también aquí, es que se ha quedado en la cola de aceptación. Sacaré tu mensaje de ahí tan pronto como pueda, si bien el supersistema este tampoco me avisa de estas cosas, por lo que tengo que estar entrando cada cierto tiempo a ver si hay alguno esperando. Un inventazo, vaya.