30 noviembre 2012

?No tengo tiempo?, mi columna en Expansión

Mi columna de esta semana en el diario Expansión se titula “No tengo tiempo” (pdf), y se refiere a la respuesta más habitual que obtengo de los directivos de empresas preocupadas por la necesidad de, como suelen decir, “estar en las redes sociales” (más sobre esto la semana que viene), pero no están dispuestos a invertir nada de tiempo en ello.

Mientras ellos se niegan a hacer nada alegando estar “muy ocupados con tareas realmente importantes”, van empezando a ver cómo la presencia y el desarrollo de determinados competidores en este terreno les produce rendimientos cuantificables y positivos, e incluso como en determinados procesos de selección, la influenciareputation capital en la red del directivo se convierte en uno de los criterios más importantes a la hora de contratarlo.

No soy un fanático del uso de métricas como Klout en procesos de selección, me parece que puede ser sumamente simplista en muchos casos. Pero sí puedo entender lo que buscan las compañías al introducirlo entre los factores a valorar en un candidato a según qué puestos, y decididamente, puede constatarse que la práctica de utilizarlo está creciendo rápidamente. Cada día encuentro más ejemplos de directivos con presencia relevante en la web social, y que son capaces además de apalancar dicha presencia como un factor importante y un valor añadido tanto para su currículum como para sus empresas. La idea de “estar bien conectado” está empezando a tener otros matices.

A continuación, el texto completo de la columna:

 

No tengo tiempo

El título de esta columna es la contestación que escucho de manera reiterada cada vez que hablo con un directivo acerca de la web social.

Cada día podemos considerar más normal que los directivos vayan empezando a entender que tener presencia en la web social es algo susceptible de aportar valor a una empresa. Estar en el entorno donde muchos de tus clientes pasan tiempo suena razonablemente lógico, aunque ello conlleve necesariamente cambios en el estilo comunicativo que no todos entienden. Pero en general, hablamos de conclusiones ya relativamente conocidas. Es a la hora de apuntar la importancia del papel de la alta dirección en el proceso de adopción cuando habitualmente se desmarcan – o, como se decía en la mili, se escaquean – con un “sí, pero no tengo tiempo”.

¿Qué significa exactamente “no tengo tiempo”? El día, seas o no directivo, tiene veinticuatro horas: si alguien encuentra más horas, por favor, que me cuente dónde. En realidad, el “no tengo tiempo” de un directivo es una manera de decir “no le otorgo la prioridad suficiente como para tener la voluntad de dedicarle ese tiempo”. Es un “muy interesante lo que me cuentas, pero no me lo creo, y por tanto, seguiré dedicando mi recurso escaso, el tiempo, a otras tareas que considero más importantes”.

¿Y si lo que un directivo puede aportar a su compañía en las redes sociales se tradujese directamente en dinero? ¿Cuánto vale un canal de comunicación? ¿Una herramienta de gestión de crisis? ¿Un escaparate para las novedades de la compañía? ¿Cuánto vale la influencia? Cada vez más directivos caen en la evidencia, a veces de manera forzada: no solo la web social tiene un potencial aporte de valor económico que justifica dedicarle su tiempo, sino que incluso aparecen empresas que seleccionan a sus directivos en función de su influencia en la misma.

¿No tengo tiempo? Lo que no tienes son claras tus prioridades.



(Enlace a la entrada original - Licencia)

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