Lectura imprescindible en Ars Technica: “File-sharing has weakened copyright – and helped society“, un estudio empírico llevado a cabo por Felix Oberholzer-Gee (Harvard Business School) y Koleman Strumpf (University of Kansas), que demuestran que la llegada del P2P y las descargas han tenido una influencia directa en una producción mayor de libros, música y cine a lo largo de la última década, contrariamente a lo que algunos agoreros sinvergüenzas afirmaban con aquello de “la creación se acabará por falta de incentivos”. Las descargas pueden, en efecto, ser malas para el copyright y para los que se dedican a comercializarlo, pero decididamente no son malas para la creación cultural ni disminuyen en modo alguno los incentivos para la creación. El efecto neto para la sociedad es positivo.
El estudio, titulado “File-sharing and copyright“, proporciona una clave fundamental: de acuerdo con la Constitución de los Estados Unidos (y con el sentido común), la función del copyright no es la de enriquecer a quienes lo comercializan, sino la de fomentar la creatividad y el progreso de las artes y de las ciencias. Ojo al dato evidente: como ya hemos dicho en numerosas ocasiones, cuando nuestros políticos apoyan leyes para proteger el copyright, no están generando un efecto positivo para la sociedad ni para la creación cultural, únicamente están favoreciendo a sus “amiguitos” y a una serie de lobbies industriales.
El efecto de las descargas y el P2P, como sabemos todos pero algunos intentan no ver mirando hacia otro lado, es positivo por tres razones:
- La canibalización de ventas es mucho más modesta de lo que la industria pretende hacer ver. Los estudios empíricos muestran que no más de un 20% del declive actual es debido a las descargas y el P2P.
- Las descargas y el P2P incrementan el consumo y el precio de bienes complementarios como los conciertos, que generan ingresos directos para los artistas.
- En muchas industrias, los incentivos económicos directos juegan un papel muy reducido a la hora de motivar la creatividad.
El paper incluye una muy buena revisión de la literatura existente en este sentido, que refuerza claramente las conclusiones y echa por tierra las pretensiones de una industria interesada y torticera: el político que sea sensible a tamañas falacias, lo está siendo con pleno conocimiento de causa, ignorando las evidencias empíricas de primera mano, e intentando conscientemente beneficiar a una industria determinada: ESTÁ PREVARICANDO.
(Enlace a la entrada original - Licencia)
Como de costumbre, Dans reinterpreta la verdad a su manera, diciendo que un artículo demuestra nosequé cuando eso es sencillamente mentira. Ni él ni su horda se han leído el artículo original, es evidente, pero da todo igual.
ResponderEliminarDa asco, cuando no risa, ver al mentecato este hablar de "papers", "estudios empíricos", "revisión de la literatura" y "evidencias empíricas" cuando brama sobre algo que no ha leído. Y en la misma entrada tiene la desfachatez de llamar a alguien sinvergüenza. Hay que joderse.