No, no es fácil ser verde, decía la rana Gustavo. Y en el panorama actual de la tecnología, ser verde ya no es simplemente un deseo por ser más respetuoso con el medio ambiente o por dejar un planeta mejor a las futuras generaciones, sino que supone la diferencia entre ser o no competitivo. Así, empezamos a ver cómo a medida que los diferentes actores del panorama tecnológico se orientan hacia el cloud computing, su énfasis en tecnologías relacionadas con la llamada Green IT se incrementa de manera notable: si la factura de mantenimiento de tus datacenters puede disminuir hasta extremos difícilmente imaginables, eso ya no supone un problema de sentirse mejor o peor con uno mismo… supone una ventaja en costes en muchos casos difícil de rivalizar.
Si el pasado Octubre hablábamos de Google como caso de éxito en Green IT porque ya había sido capaz de alcanzar unos ratios de eficiencia energética (PUE, o Power Use Efficiency, el cociente entre el uso total de energía en un datacenter frente al consumo de los ordenadores contenidos en él… Ojo a este parámetro si eres responsable de sistemas, porque te vas a topar con él en menos de un año) de 1.21 para el total agregado de sus datacenters (mucho mejor que el más optimista de los escenarios planteados por la EPA para dentro de tres años, ahora es Microsoft la que empieza a presentar resultados de cómo de verde y de eficiente va a ser su nube: en una entrada en su blog, “Our Vision for Generation 4 Modular Data Centers - One way of Getting it just right…“, Michael Manos, responsable de los datacenters de la compañía, habla de objetivos de PUE de 1.125 para 2012, y de arquitecturas de diseño modular que permiten situar datacenters allá donde son más necesarios en un abrir y cerrar de trailer. Para hacernos una idea, el PUE medio de un datacenter hoy en día está en torno a 2.5, es decir, que de cada 2.5 Watios suministrados al datacenter, únicamente uno es para el consumo de los ordenadores, mientras que el restante watio y medio se utiliza en cuestiones como refrigeración, conexiones, SAI, etc. Una situación profundamente ineficiente, pero que al reflejarse típicamente en el capítuo de gastos generales, queda lejos de las responsabilidades del responsable típico de IT, al que se suele medir por un parámetro casi único de calidad de servicio (evitar el downtime) y que, por tanto, no tiene entre sus objetivos este tipo de métricas (a pesar de suponer un impacto directo sobre la línea inferior de la cuenta de resultados).
Si todavía no te estabas dando cuenta de cómo de reales y de próximos están estos temas del cloud computing, echa un ojo al vídeo de Microsoft sobre su “Generation 4.0 Datacenter Vision“ y verás cómo se compite hoy en tecnología: eficiencia energética, refrigeración, modularidad… en la nube, ser verde ya no es un deseo: es una necesidad.
(Enlace a la entrada original - Licencia)
No se preocupe si sus hijos son verdes y pasan mucho tiempo en la nube: preocúpese si no lo hacen.
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