Amazon y los procesos de adopción

Amazon presentó su nueva línea de productos en la familia Kindle, y el planteamiento del tema me resulta sumamente sugerente por varios motivos.

Primero, porque me gusta ver presentaciones en ese estilo, con sorpresas, con clima de expectación, con entidad suficiente para convertirse en protagonistas, pero que no vengan siempre del mismo sitio. Me gusta ver a Jeff Bezos en un escenario, porque me parece un genio. Y segundo, porque el marcadísimo enfoque de “no vendemos gadgets, sino servicios” me parece muy interesante, y creo que es lo que puede llevar a Amazon a convertirse en uno de los actores más interesantes en este cambio de hábitos global que estamos viviendo como sociedad. El mundo post-PC, el consumo de información independizada del soporte físico o el acceso inmediato a todo tipo de información necesita competidores con ese enfoque, y aunque en el caso de Amazon no hablamos en absoluto de una novedad de planteamiento, sí lo es el énfasis en el tema y su apoyo en un posicionamiento de precios aún más agresivo. Hay muchos millones de usuarios esperando ser atraídos de manera irremediable por ese modelo de consumo, y Amazon apuesta por lanzarse decididamente a su conquista.

Sobre la nueva línea de productos, que desgraciadamente solo estará disponible en España por ahora de manera limitada, me intrigan novedades puntuales, como la idea de empaquetar dos antenas WiFi en un dispositivo como forma de acelerar la conectividad, pero fundamentalmente me llama la atención la idea de intentar acomodar la mayor cantidad posible de usos: el mayoritariamente doméstico (o en zonas con cobertura WiFi asegurada), frente al de aquel que se lleva su dispositivo a todas partes. La entrada de Amazon en el mundo MVNO no es de ahora (proviene en realidad de la época del primer Kindle), pero sí supone escalar de manera limitada y controlada su oferta anterior, con el ánimo, como dicen algunos, de poner un pie en la puerta de algo potencialmente revolucionario. Y es ahí, en el área de la exploración, donde el tema me resulta verdaderamente intrigante. ¿Hasta qué punto conseguirá Amazon atraer a un segmento amplio de consumidores con dispositivos de precios razonables y tarifas limitadas? ¿Cuántos de esos clientes se inclinarán por dispositivos sin emisión de publicidad frente a los que prefieran ahorrarse veinte dólares a cambio de recibir anuncios? ¿Qué implicaciones podrá extraer Amazon de la observación de esos datos?

Amazon mantiene una filosofía que me ha resultado muy atractiva desde sus inicios: la de utilizar cualquier oportunidad, cualquier métrica, cualquier clickstream y cualquier producto para aprender. Aprender sobre el cliente, sobre el mercado, sobre los hábitos de consumo, sobre aquello que juega un papel en nuestras decisiones de compra. Una empresa que es capaz de sublimar la compra por impulso hasta el punto de convertirla en una línea fundamental (y diferencial) en su cuenta de resultados no lanza las cosas por casualidad, y la nueva gama de Kindle no es como es por ningún tipo de decisión caprichosa. Es, simplemente, un paso, un punto de captura de información para plantear el siguiente movimiento.

Por el momento, lo interesante será ver las dinámicas de adopción. Amazon pretende separarse claramente de la abrumadora oferta de tablets Android ofreciendo otros precios y, sobre todo, otro tipo de planteamiento centrado en servicios: sus propias aplicaciones y sus propios productos. En pocos años hemos pasado de que pedir un libro por internet fuese cosa de gente rara, a ver carretillas cargadas de paquetes con sonrisa por el centro de Nueva York. De ver a alguien un Kindle como un apócope del frikismo, a ver cómo los Kindles se hacían habituales del metro, el autobús o hasta la playa, o cómo pasaban a jugar un papel fundamental en el desarrollo de nuevos segmentos de consumo ligados especialmente a determinados géneros literarios. ¿Veremos en breve a un segmento creciente de consumidores optar por tablets de Amazon para consumir contenidos en sus hogares, para enchufarlos a la televisión, para descargarse libros y otras publicaciones, o para llevarlos encima de manera habitual? Ojo a ese comentario del anuncio de televisión: “we are the reinventors of normal”. El interés por jugar un papel relevante en el desarrollo de un proceso de adopción. Esa es la parte que de verdad me gusta.

 

 

 

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