14 abril 2010

Hablando de portales de empleo, en El País

Paula Chouza, de El País, me llamó para preguntarme sobre portales de empleo y, sobre todo, acerca del modelo de negocio de los mismos, en los que empezaba a ver una importante proliferación de esquemas de pago por parte de los candidatos. Hoy publica su artículo con Miguel Calzada, titulado, “El trabajo no es para el mejor, es para el que paga“.

Aprovechamos la larga conversación telefónica sobre el artículo para hablar acerca de los mercados bilaterales o de dos caras (two-sided markets), uno de los temas que utilizo habitualmente en clase (suele ser la sesión siguiente a la discusión del caso Google), y del tipo de compromisos que se alcanzan en esos mercados: en el fondo, la dinámica del mercado de los portales de empleo no es muy diferente a la que vivió en su momento el mercado de los buscadores. Cuando los buscadores vendían las primeras posiciones al mejor postor, no hacían más que replicar el modelo de publicidad tradicional: los lugares más destacados, la mejor valla de la ciudad, el mejor momento del bloque publicitario en el prime-time, la contraportada en la revista, las consigue el que más paga. ¿Problema? Si tu mercado tiene dos caras, y al otro lado tienes a un usuario de un buscador o a una empresa que busca candidatos, al prolongar este modelo, estás dando un peor servicio al cliente “del otro lado”, que en lugar de acceder a los mejores resultados (o a los mejores candidatos para un puesto), accede a los que más pagan, que no tienen porqué ser necesariamente los de mejor calidad. Al final, llegamos a puntos de compromiso marcados por los extremos: si un portal establece un componente demasiado orientado al pago de los candidatos, la sostenibilidad se resiente: los candidatos ya no se ven diferenciales (un porcentaje muy alto paga por ser destacado, con lo que el valor del “destacado” disminuye), y las empresas ven distorsionados los criterios razonables de selección.

Un equilibrio, sin duda, difícil de mantener.

(Enlace a la entrada original - Licencia)

0 comentarios:

Publicar un comentario

ATENCIÓN: Google ha metido en Blogger un sistema antispam automático que clasifica como spam casi lo que le da la gana y que no se puede desactivar.

Si después de hacer tu comentario este no aparece, no se trata del espíritu de Dans que anda censurando también aquí, es que se ha quedado en la cola de aceptación. Sacaré tu mensaje de ahí tan pronto como pueda, si bien el supersistema este tampoco me avisa de estas cosas, por lo que tengo que estar entrando cada cierto tiempo a ver si hay alguno esperando. Un inventazo, vaya.