WhatsApp, el servicio de mensajería instantánea propietario y multiplataforma para móviles que ha sido capaz de convertirse en parte de nuestro lenguaje cotidiano a pesar de ser el mayor desastre conocido en términos de seguridad, está según TechCrunch en conversaciones con Facebook de cara a una posible operación de adquisición.
Resulta relativamente sencillo ver el interés que Facebook, una red social gratuita sustentada mediante publicidad y con una penetración cuando menos discreta en el mundo móvil, puede tener en WhatsApp, una aplicación de pago (aunque muchos la hayan descargado gratis, la app cuesta $0.99 en iOS y solo es gratuita durante el primer año en Android), que reniega de la publicidad como modelo, y con una presencia casi ubicua en una amplia cantidad de mercados e idiomas.
La operación, de hecho, resultaría relativamente chocante en función de la personalidad de uno de los cofundadores de la compañía, Jan Koum, que en reiteradas ocasiones ha expresado su desprecio por los modelos basados en publicidad (“when advertising is involved you the user are the product”) y por las compañías que tienen como finalidad ser adquiridas (“people starting companies for a quick sale are a disgrace to the valley“). Las palabras, claro está, son libres: Koum también ha comentado en ocasiones tener un gran interés en el desarrollo de avances en la seguridad de su producto, y la plataforma como tal no solo sigue siendo un desastre, sino que la mayoría de los expertos creen que los problemas están tan en su base, que sería necesario prácticamente replantearla desde cero para poder convertirla en un producto seguro para sus usuarios.
En caso de plantearse, la adquisición tendría, sin duda, un precio sumamente elevado: hablamos de la segunda app de pago más popular en la App Store, de siete millones de descargas en Google Play, de presencia relevante en plataformas como BlackBerry, Nokia o Windows Phone, y de más de mil millones de mensajes intercambiados al día. ¿Y cómo respondería el mercado, indudablemente dinámico, ante una hipotética adquisición? En este momento, WhatsApp reina en una categoría en la que otros competidores pugnan por entrar: desde la asiática LINE con su estética manga, hasta iniciativas con planteamientos basados en la seguridad o en la extensión de las funciones sociales como Spotbros (de la que he hablado anteriormente y de la que soy asesor) o proyectos de operadoras, como Joyn y similares. La pregunta, sin embargo, es cómo de sólidos resultan los liderazgos en una categoría sujeta a una fuerte evolución, en la que las cosas pueden cambiar rápidamente en función de muchos factores, como la toma de conciencia de los usuarios, los problemas de estabilidad y seguridad, las modas o, sobre todo, el desarrollo del efecto red.
Si la adquisición tiene finalmente lugar, podríamos estar hablando de un importante refuerzo para WhatsApp en función de los recursos de Facebook, de un funcionamiento relativamente independiente durante un tiempo largo debido a las diferencias de plataforma y filosofía, o de un desastre en el que Facebook paga por una app con una imagen de fiabilidad muy comprometida y que ya vio pasar su mejor momento: resulta muy difícil saberlo. Pero sin duda, es una operación a cuya eventual confirmación habrá que estar atentos.
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Si después de hacer tu comentario este no aparece, no se trata del espíritu de Dans que anda censurando también aquí, es que se ha quedado en la cola de aceptación. Sacaré tu mensaje de ahí tan pronto como pueda, si bien el supersistema este tampoco me avisa de estas cosas, por lo que tengo que estar entrando cada cierto tiempo a ver si hay alguno esperando. Un inventazo, vaya.